Resulta sorprendente ver el papel de Egipto en la Copa de África que se está celebrando en Ghana. Son los actuales campeones, sí, pero llama la atención que fueran capaces de apalizar ayer a la gran favorita, Costa de Marfil. ¿Por qué diablos nunca aparecen después en los Mundiales?
Lo cierto es que Egipto no es un país con una gran tradición futbolística, y a diferencia de los marfileños, apenas tiene jugadores en equipos europeos (la gran estrella es Mohamed Zidan, del Hamburgo alemán). Pero cuando se trata de competir contra sus rivales continentales, los faraones se transforman y cumplen con creces.
Sea como sea, los norafricanos se enfrentarán en la final del domingo al Camerún de Samuel Eto’o. En caso de vencer, sumarían su sexto título… Prohibido no volver a tener en cuenta a los egipcios.
La rueda de prensa 